La ambliopía, también conocida como "ojo vago", es una afección oftalmológica común en la que uno de los ojos no desarrolla una visión clara durante la infancia. Afecta aproximadamente al 3% de la población y, si no se trata a tiempo, puede causar discapacidad visual permanente. Es crucial detectarla temprano, ya que el tratamiento adecuado puede ayudar a mejorar significativamente la visión.

La ambliopía se produce debido a una interrupción en el desarrollo visual durante la infancia temprana. Durante los primeros años de vida, el cerebro y los ojos están en una fase crucial de desarrollo y aprendizaje visual. Durante este período, cualquier factor que interfiera con la formación de una visión clara y nítida en ambos ojos puede llevar a la ambliopía.

El tratamiento de la ambliopía se centra en estimular y mejorar la visión del ojo afectado, permitiendo que el cerebro desarrolle una visión más clara y nítida. El objetivo principal del tratamiento es que ambos ojos trabajen juntos de manera eficiente y se restablezca la visión normal en el ojo ambliope. El tratamiento debe iniciarse lo antes posible, preferiblemente durante la infancia temprana, ya que después de cierta edad, el cerebro tiene dificultades para adaptarse y mejorar la visión.

La ambliopía debe tratarse porque es una condición que puede llevar a una pérdida permanente de la visión en el ojo afectado si no se aborda a tiempo. Durante los primeros años de vida, el cerebro y los ojos están en una etapa crítica de desarrollo y aprendizaje visual. Si en esta etapa, el ojo no desarrolla una visión clara y nítida debido a la ambliopía, el cerebro tiende a suprimir la información visual del ojo afectado y depende en gran medida del ojo más fuerte.